Cargando...

¿QUÉ ES EL APEGO?

El apego es un instinto humano básico que nos ayuda a conectarnos con los demás.

¿De dónde surge el apego?

El apego surge cuando se está seguro de que la otra persona estará ahí incondicionalmente, lo que facilita que aparezcan la empatía, la comunicación emocional y hasta el amor entre estas personas.

Estamos hechos para depender de una figura significativa

La teoría del apego es la teoría que describe la dinámica de largo plazo de las relaciones entre los seres humanos. Su principio más importante declara que un recién nacido necesita desarrollar una relación con al menos un cuidador principal para que su desarrollo social y emocional se produzca con normalidad. La teoría del apego es un estudio interdisciplinario que abarca los campos de las teorías psicológicas, evolutivas y etológicas.

Los antecedentes del estudio del apego proceden de la etología. Por ejemplo de los crueles experimentos de Barlow con crías de mono, a los cuales separaba de la madre al poco de nacer y con los que comprobó que preferían permanecer junto a una madre de felpa que no alimenta pero da calor y tiene un reloj a modo de imitación de latidos del corazón y a la que se la identifica con una figura que provee seguridad, cariño y cuidados a estar junto a una figura de metal que proporcione todo el alimento que desee. Las crías de mono preferían el cariño a la leche a discreción.

Esto viene a demostrar que se prioriza el apego sobre otras necesidades básicas. También son un antecedente los estudios sobre la impronta en animales, por ejemplo los patitos que siguen instintivamente a la primera figura que ven al nacer, aunque sea una lata.

Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, los huérfanos y sin hogar presentaron muchas dificultades, y la (Organización de las Naciones Unidas) (ONU) le pidió al psiquiatra y psicoanalista John Bowlby que realizara un estudio sobre el tema, que él tituló "Privación materna". La teoría del apego surgió de su trabajo posterior sobre las cuestiones planteadas.

¿QUÉ ES EL APEGO?

El apego hacia alguien, concepto que como ya hemos visto debemos a la etología, se define como una vinculación afectiva intensa, duradera, de carácter singular, que se desarrolla y consolida entre dos personas, por medio de su interacción recíproca, y cuyo objetivo más inmediato es la búsqueda y mantenimiento de proximidad en momentos de amenaza ya que esto proporciona seguridad, consuelo y protección.

En la década de los 80 la teoría se extendió a los adultos y se aplicó a las relaciones de pareja.

Implicaciones de la teoría del apego aplicada a las relaciones de pareja

No se trata de un sentimiento inmaterial, sino de conductas observables que comienzan de manera refleja. John Bowlby fue el primer psicólogo en desarrollar una "Teoría del apego".​ Un arranque de inspiración llevó a John Bowlby a comprender que la evolución nos ha programado para elegir a un individuo en particular de nuestro entorno y convertirlo en alguien valioso para nosotrosEstamos hechos para depender de una figura significativa. Esta necesidad comienza cuando estamos en el útero y termina cuando morimos.

Contar con alguien que nos cuide nos da más posibilidades de sobrevivir

Bowlby planteó que, a lo largo de la evolución, la selección natural favorecía a las personas que creaban vínculos de apego porque estos les proporcionaban una ventaja en la competición por la supervivencia. En épocas prehistóricas, los individuos que solo confiaban en sí mismos y carecían de compañeros que los protegieran tenían más probabilidades de acabar convertidos en presas. En cambio, con relativa frecuencia, aquellos que contaban con alguien que cuidaba de ellos sobrevivían el tiempo suficiente para transmitir a su descendencia la importancia de crear lazos estrechos.

Estamos hechos para depender de una figura significativa. Esta necesidad no acaba con la infancia.

Desde el punto de vista emocional, el apego surge cuando se está seguro de que la otra persona estará ahí incondicionalmente, lo que facilita que aparezcan la empatía, la comunicación emocional y hasta el amor entre estas personas. Desde el punto de vista cognitivo, la propia existencia de una relación de apego, conlleva a la construcción de un modelo mental de dicha relación. Existe la posibilidad de que la figura de apego cambie a lo largo de la vida.

El apego surge cuando se está seguro de que la otra persona estará ahí incondicionalmente

Si bien inicialmente la teoría del apego surge y se centra en el ámbito infantil posteriormente se amplia al mundo adulto y a las relaciones de pareja, y es sobre cómo aplicar la teoría de apego en adultos sobre lo que trata este sitio.

Cada relación de apego tiene sus características específicas, dado que algunos factores como la edad o la interacción tienen mucha influencia. Estas relaciones son muy amplias (niño-adulto, adulto-adulto) , pero las funciones más importantes que ofrece una figura de apego son las de:

  • Darle seguridad, autoestima y la posibilidad de intimar a la otra persona.
  • Ofrecerle el tener una comunicación emocional privilegiada.
  • Poder refugiarse en situaciones de angustia o confusión para sentirse seguro.

¿De dónde procede mi estilo de apego?

Al principio, se pensó que los estilos de apego entre adultos nacían de la educación recibida. En consecuencia, se formuló la hipótesis de que la conducta de cada cual en el seno de la pareja dependía de los cuidados que había recibido en la infancia:

  • Si los padres se mostraban sensibles, accesibles y atentos, la persona desarrollaría un estilo de apego seguro
  • Si su atención era errática, el individuo tendería a la categoría ansiosa
  • Si eran distantes, rígidos y desapegados, la persona crecería para convertirse en un adulto evasivo.

Hoy en día, sin embargo, sabemos que los estilos de apego entre adultos dependen de factores diversos, de los cuales la relación con los padres solo es uno más. Hay que tener en cuenta también otros factores que pueden influir en qué tipo de apego nos corresponde, como son nuestra carga genética o las experiencias vitales.

Otras acepciones de los tipos de apego (attachment en inglés) son:

  • Apego seguro (Secure attachment): Apego seguro
  • Apego ansioso (Anxious-ambivalent attachment): Apego ambivalente, apego ansioso ambivalente, apego resistente, temeroso
  • Apego evasivo (Anxious-avoidant attachment): Apego evitante, Apego huidizo, apego ansioso-evitante, apego evitativo, apego alejado
  • Apego ansioso-evasivo (Disorganized/disoriented attachment): Apego desorganizado, desorganizado/desorientado, preocupado

Depende de los autores de cada estudio, del país, de las traducciones, que se denomine de una forma u otra a los estilos de apego.

APEGOS INSEGUROS
Una variable crítica es la ansiedad relacionada con el apego. Las personas que obtienen una puntuación alta en esta variable tienden a preocuparse por si su pareja está disponible, receptiva, atenta, etc. Estilo de apego ansioso o ambivalente.
La otra variable crítica es la evitación relacionada con el apego. Las personas que puntúan alto esta dimensión prefieren no confiar ni abrirse a los demás. Acostumbran a huir regularmente. Estilo de apego evasivo o evitativo.
El apego desorganizado es muy poco habitual y es una combinación de los dos anteriores. Ansiedad + evitación.
 
APEGO SEGURO
Un adulto de apego seguro puntúa muy bajo en estas dos dimensiones.

¿Por qué hay diferentes estilos de apego?

Nacemos con una clara disposición biológica hacia un estilo de apego u otro, después será el entorno, la cultura, los valores y expectativas que nos rodean, los que se encargarán de atenuarlo o intensificarlo.

Profundicemos un poco en un factor clave: La carga genética.

Si existen unos osos de color pardo adaptados a los tonos y colores de paisajes montañosos les resultará sencillo camuflarse. Regularmente nacerá alguno de color blanco, cuyas posibilidades de sobrevivir serán inferiores a las de sus hermanos ya que, por ejemplo, les localizarán antes los depredadores. Pero si se produce un cambio climático, como puede ser una glaciación, entonces los nacidos blancos tendrán ventaja a la hora de cazar, se harán más fuertes que los marrones, tendrán más descendencia y su característica la irán heredando generación tras generación al ser una ventaja competitiva.

La diversidad es imprescindible para la supervivencia de las especies

En una misma camada de perros es habitual que cuando vamos a elegir un cachorro resulta que la mayoría son curiosos y confiados, se acercan sin ningún miedo al ser humano, pero siempre hay otros más precavidos o miedosos, e incluso alguno puede ser arisco. Si todos fuesen confiados y apareciese una época larga de hambruna entre el grupo humano con el que conviven, correrían el riesgo de desaparecer al no tener un instinto de huir (solo tendrían alguna posibilidad los desconfiados). Sin embargo, mientras las condiciones sean favorables, agradar a los humanos les garantiza muchas posibilidades de reproducirse. 

La naturaleza se asegura que haya diversidad no solo en aspectos morfológicos sino también en los psíquicos y de comportamiento

Una condición fundamental de la evolución es la heterogeneidad. Los seres humanos conforman una especie muy heterogénea, cuya apariencia, actitud y conducta varía mucho de un individuo a otro. Esta característica explica en gran medida nuestra capacidad para adaptarnos a casi cualquier nicho ecológico existente sobre la faz de la Tierra. Si todos fuéramos idénticos, el más mínimo reto ambiental amenazaría nuestra supervivencia como especie.

El estilo de apego no difiere de cualquier otra característica humana. Aunque todos compartimos una misma necesidad básica de crear vínculos estrechos, la manera de hacerlo varía de un grupo a otro.

  • En un entorno muy peligroso, la tendencia a invertir gran cantidad de tiempo y energía en una única persona nos perjudicaría, porque esta no tendría grandes probabilidades de sobrevivir durante mucho tiempo; sería más sensato abstenerse de crear lazos demasiado estrechos y dedicarse a otros menesteres (de ahí el estilo evasivo o evitativo).
  • Otra posibilidad en condiciones desfavorables sería adoptar la estrategia opuesta, tender a la hipervigilancia y hacer lo posible por permanecer cerca de las figuras de apego (de ahí el estilo ansioso o ambivalente).
  • En cambio, en un contexto propicio, invertir energías en crear vínculos de apego con un individuo en particular resultaría muy rentable tanto para este como para su descendencia (de ahí el estilo seguro). ​

Es verdad que en la sociedad moderna no sufrimos la amenaza de los depredadores, como les sucedía a nuestros ancestros, pero en términos evolutivos nos hallamos a solo una fracción de segundo del viejo orden de cosas. El Homo sapiens, que vivía en una era del todo distinta, nos ha legado el cerebro emocional, de tal modo que nuestras emociones están diseñadas para operar en su entorno y superar los peligros que aquél afrontaba. Los sentimientos y conductas que definen las relaciones actuales no difieren mucho de los que caracterizaban a nuestros antepasados.

QUIERO LOGRAR SER UNA PERSONA SEGURA DE MI misma en una relación
¿Qué has hecho hasta el momento para conseguir lo que quieres lograr?
Te animo a que nos embarquemos juntos en un pequeño viaje, desde un revelador programa de coaching personalizado, que te acerque a poder disfrutar de relaciones más satisfactorias y felices.

¿Quieres saber qué estilos de apego en adultos hay?

A cada estilo de apego le corresponden ideas y actitudes muy diferenciadas de relación con el propio individuo, con sus parejas, y con los lazos afectivos.

Si te interesa profundizar en la aplicación de la teoría del apego y sus implicaciones en las relaciones de pareja aquí tienes un extenso documento sobre ello:

Implicaciones del apego en las relaciones

MANERAS DE AMAR

Este libro inspirador del sitio Apegos Posibles es una forma muy amena y rigurosa científicamente de conocer cuales son nuestras maneras de amar. En él vas a poder profundizar sobre gran parte de los contenidos que mostramos de forma tan somera y resumida en nuestro sitio web relacionado con el apego.