Nosotros vivimos en dos mundos a la vez, el mundo de lo intangible y el mundo de lo tangible. En el mundo intangible habita lo que no se puede tocar, emociones, esperanzas, miedos, y sobretodo, y esto es algo que tiene una relación directa con la ansiedad, habitan el pasado y el futuro. En el mundo tangible habitan los hechos, lo que ocurre ciertamente, lo que se puede tocar, y el presente.
Cuando estamos en el mundo intangible y nuestros pensamientos no son positivos nos generan emociones que provocan ansiedad. ¿Y si no consigo ...? ¿Cómo me pudieron hacer esto a mi? ¿Qué va a ser de mi? ¿Porqué me ha ocurrido? Jamás lograré ... En ese mundo habitan los miedos, el pasado, y las proyecciones del futuro. Habitan las preocupaciones.
El mundo tangible es el presente, y el presente es importante comprender que es perfecto tal y como es ya que es el único que existe y posible en este momento. En el presente te ocupas de las cosas, actúas. Los monstruos y la ansiedad son gigantes en el mundo del intangible, para pelear con ellos hay que ir al mundo tangible, allí son pequeños y se les puede vencer.
¿Qué puedes empezar a hacer ya para pasar más tiempo en el mundo tangible?