Todos necesitamos y anhelamos el poder tener una relación de pareja que nos haga sentir bien, es algo que llevamos de fábrica como seres humanos ya que forma parte de nuestra genética, y de esa premisa parte la teoría del apego.
El estilo de apego no se diferencia de otras características que tenemos los humanos, igual que compartimos la necesidad de sentirnos cuidados y atendidos cuando somos niños, en nuestra edad adulta queremos crear relaciones estrechas con nuestra pareja, lo que ocurre es que los diferentes tipos de apego entienden de formas diferentes la manera de hacerlo.
En Apegos Posibles te vamos a enseñar los principios básicos de la teoría de los apegos en adultos y como aprovecharte de ello para que tus relaciones de pareja sean más satisfactorias.
Las investigaciones más avanzadas acerca del apego y las relaciones de pareja demuestran que los vínculos afectivos poseen tanto peso en la edad adulta como en la infancia. Estamos biológicamente programados para depender de otras personas igual que un niño depende del afecto y los cuidados de su madre y su padre.
Aprender sobre el Apego te va a servir para comprender y mejorar tus relaciones de pareja
A veces leyendo los diferentes estilos de apego identificamos rápidamente a cuál pertenece nuestra pareja, pero en otras ocasiones no es tan sencillo.
Si bien la mayoría de las personas que leen sobre los tipos de apego se identifican claramente con alguno de ellos te ayudamos a que descubras cuál es el tuyo con este test.
Las personas son dependientes emocionales en cuanto sus necesidades emocionales no se ven satisfechas.
Como persona de estilo de apego seguro que eres no te cuesta demostrar cariño a tu pareja y estar atento a ella.
Como persona de apego evasivo o evitativo es muy importante para ti mantener la independencia, le das mayor valor a estar solo que a estar acompañado.
Como persona de apego ansioso o ambivalente sueles sentirte muy unido a tu pareja, tienes una gran capacidad para intimar a fondo, y vives inseguridades.
A cada estilo de apego le corresponden ideas y actitudes muy diferenciadas de relación con el propio individuo, con sus parejas, y con los lazos afectivos.
La existencia de una base de seguridad constituye un requisito necesario para que un niño desarrolle un apego seguro y la facultad de explorar y aprender.
El sistema de apego consiste en un conjunto de emociones y conductas que nos empujan a permanecer junto a nuestros seres queridos para que nos proporcionen seguridad y protección.
El apego surge cuando se está seguro de que la otra persona estará ahí incondicionalmente. Estamos hechos para depender de una figura significativa.
¿Tiendes a obsesionarte con tu pareja y te provoca ansiedad el no saber si te quiere lo suficiente?, ¿Te aferras a relaciones que no te hacen sentir feliz?, ¿O quizá te sientes incómodo cuando tu pareja te demanda más y entonces acostumbras a huir o poner distancia emocional?
"Tengo la sensación de que mis parejas se muestran reacias a vincularse tanto como yo soy capaz, eso me lleva a angustiarme con la idea de que mi pareja no me quiera lo bastante o no desee pasar conmigo la cantidad de tiempo que necesito. Mi anhelo de crear un vínculo tan estrecho en ocasiones aleja a mis pretendientes o parejas."
"Me empiezo a encontrar algo molesto y nervioso cuando mi pareja busca mayor intimidad y compromiso en la relación. No me es fácil confiar completamente en la otra persona y aceptar el depender emocionalmente de ellas. Frecuentemente doy con parejas que quieren relaciones más estrechas de las que a mí me resultarían cómodas. "
"Me resulta relativamente sencillo vincularme a mis parejas y me resulta agradable depender de ellas emocionalmente y permitir que dependan de mí. Disfruto de la intimidad y una relación estrecha, sin preocuparme mucho porque me puedan dejar o me pidan un mayor compromiso. Expreso mis necesidades y sentimientos con facilidad a mi pareja. "
Alex Zanardi
Las relaciones de pareja plenas y satisfactorias no surgen de la búsqueda de la perfección o la idealización, ni permaneciendo en la comodidad. Se crean sobre la aceptación mutua de nuestras imperfecciones, asumiendo el compromiso y la responsabilidad de cuidar y atender siempre al otro, teniendo y disfrutando de la seguridad de sentirnos lo mas valioso en la vida de nuestra pareja, y cultivando a un "nosotros" en el que nuestros esfuerzos y dedicación se orientan hacia un bien común que trasciende del yo y del tú.
